junta para ETF derivados

Los fondos cotizados en bolsa (ETF) han tomado el mundo de los fondos de inversión por asalto, y son una alternativa popular a las acciones individuales y los fondos de inversión para muchos inventores,. Exploremos sin son derivados o no. Y aunque los ETF se han hecho cada vez más populares, sus muchas ventajas pueden hacer que se pregunte si los ETF son demasiado buenos para ser verdad.

Una de las preguntas habituales que la gente se hace sobre los ETF es si son derivados, lo que supone un riesgo y una especulación añadidos. La respuesta corta es que no. Para entender por qué, primero hay que saber cómo funcionan los ETF, por qué se han hecho tan populares y su relación con los derivados.

¿Qué son los derivados?

Un derivado es una herramienta de inversión compleja cuyo valor proviene de otra fuente. Se trata de un contrato entre dos partes en el que cada una de ellas se compromete a llevar a cabo una determinada acción en determinadas circunstancias, como un cambio de precio del activo subyacente.

Los precios de los derivados suelen basarse en la fluctuación del activo subyacente. Estos activos subyacentes suelen ser acciones, materias primas, bonos, divisas o incluso criptodivisas. Los fondos de inversión utilizan los derivados para protegerse del riesgo de inversión.

Los derivados pueden negociarse en las bolsas o en el mercado extrabursátil y se consideran inversiones de mayor riesgo. Entre los ejemplos de derivados se encuentran los futuros y las opciones que permiten, o exigen, que las dos partes compren o vendan un activo concreto a un precio determinado en el futuro.

Por ejemplo, supongamos que hay un contrato de futuros sobre el petróleo a 700 pesos el barril dentro de tres meses, cuando actualmente se vende a 650 pesos el barril. Tu crees que el precio superará los 700 pesos dentro de tres meses, así que compra el contrato con la esperanza de que dentro de tres meses el precio del petróleo sea más alto y puedas venderlo a un precio superior al que lo compraste.

derivados del trabajo

¿Son los ETFs derivados?

Es posible que se pregunte si los ETFs son derivados (Después de todo, técnicamente derivan su valor de los activos subyacentes de un fondo) Pero la respuesta breve es que no, los ETF no son derivados.

En primer lugar, un derivado es un contrato entre dos partes en el que se comprometen a realizar una determinada acción bajo ciertas circunstancias en el futuro. Por ejemplo, una opción de compra da al titular del contrato el derecho (pero no la obligación) de comprar un valor subyacente en el futuro a un precio determinado, llamado precio de ejercicio. El titular del contrato no tiene que comprar el valor. Pero si decide hacerlo, la otra parte del contrato está obligada a vender.

Pero en el caso de un ETF, el fondo ya posee los activos subyacentes. En lugar de comprar un contrato que dicta las transacciones futuras, tu estás comprando una pequeña parte de los activos que posee el fondo y puedes beneficiarte de un aumento en los precios de esos activos.

inversiones con derivados

Así que, aunque es cierto que los ETFs obtienen su valor de sus activos subyacentes, no es exactamente igual que un derivado real.

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